Últimamente cada vez más, nos vamos familiarizando con conceptos tecnológicos como el de Internet of Things (IoT) o Artificial Intelligence (AI). Sin embargo, hoy venimos a hablar de un concepto que va más allá. Una tecnología aún más avanzada: el Artificial Intelligence of Things (AIoT).
Artificial Intelligence of Things: La combinación entre el IoT y la AI
Como podemos imaginar por su nombre, la tecnología AIoT hace referencia a la combinación de las tecnologías IoT y AI. Para conocer el significado de este término primero debemos recordar brevemente el de sus dos componentes.
Internet of Things (IoT)
El Internet de las Cosas es la tecnología mediante la cual cualquier objeto puede conectarse y compartir información y datos a través de Internet. Adentrándonos un poco más en el concepto, el IoT comprende un sistema de dispositivos interrelacionados y conectados. Máquinas, objetos e incluso personas que tienen la capacidad de transferir datos e información mediante una red sin necesidad de la intervención humana.
Esta tecnología está cada vez más presente en los diferentes sectores del mercado, en las ciudades que habitamos y en nuestra vida diaria. Esto es debido a la gran cantidad de opciones y oportunidades que presenta tanto para mejorar la vida de las personas o los entornos empresariales, como para impulsar las ciudades inteligentes.
Artificial Intelligence (AI)
Por otro lado tenemos la Inteligencia Artificial, un concepto quizás más familiarizado incluso en sectores no tan tecnológicos. La AI hace referencia al aprendizaje automático de las máquinas. El objetivo es que estas sean capaces de predecir cambios, ya sea para detectar fallos en patrones ya creados o bien para alertar sobre futuros fallos en el sistema.
Su aplicación también está bastante extendida en diferentes sectores como el de la salud, el transporte o la industria. Dentro de ella existen diferentes tipos de inteligencia que debemos diferenciar: sistemas que actúan como humanos; sistemas que piensan como humanos; sistemas que actúan racionalmente, y sistemas que piensan racionalmente.
Entonces, ¿Qué es el AIoT?
Después de recordar qué funciones tienen estas dos tecnologías en nuestras vidas, ya tenemos una base para hacernos una idea de qué es el AIoT. Igualmente, a continuación vamos a explicarlo más detalladamente.
Esta nueva tecnología se encarga básicamente de dotar a estos dispositivos conectados que mencionábamos en el IoT, de una autonomía que les permita analizar situaciones y tomar decisiones (aquí es donde aparece la AI).
Objetivo del Artificial Intelligence of Things
El objetivo principal de esta tecnología es conseguir maximizar los beneficios del IoT apoyándose en la AI. Los dispositivos IoT generan enormes cantidades de datos, por tanto, si queremos ser capaces que aprovecharlos al máximo y dar sentido a toda esta información, es necesario implementar en ellos la tecnología AI. Así conseguimos que los sistemas sean capaces de autocorregirse, autorrepararse, adaptarse y mejorar continuamente. De esta manera, podremos crear soluciones inteligentes para las ciudades, la industria, el sector de la salud o el transporte, etc. Además, cabe destacar que otras de las ventajas del AIoT son la facilidad de uso, la seguridad y la privacidad que esta ofrece.
Aquí es donde aparece un nuevo concepto: el Edge Computing (o computación al borde). Esta es, básicamente, la capacidad de procesar datos, analizar situaciones, evaluar posibles escenarios y tomar decisiones desde el propio dispositivo, y no desde un servidor común a kilómetros de distancia.
Tecnologías y aplicaciones del AIoT
Aunque no seamos conscientes, el AIoT ya está presente en muchos ámbitos de nuestro día a día, tanto dentro de las empresas como en nuestra vida personal.
Teléfonos inteligentes
Podemos ver el AIoT en la tecnología de los actuales smartphones, ya que utilizan aplicaciones inteligentes que aprenden a responder frente la interacción humana. Un ejemplo de ello son los asistentes virtuales mediante los cuales puedes realizar búsquedas o llamadas haciendo uso de tu voz.
Redes sociales, webs, aplicaciones móviles, …
Los sistemas de recomendación que utilizan los sitios webs de series, películas o música, se basan en técnicas de AI. Lo mismo sucede con las aplicaciones a la hora de mostrarte primero las publicaciones más relevantes. Se genera un patrón de información de tus gustos y a raíz de ahí, realizan recomendaciones personalizadas.
Algo similar ocurre con el e-mail, que es capaz de reconocer los correos de social media o spam y enviarlos a diferentes carpetas en base a determinadas características.
Industria
Dentro del mundo industrial las oportunidades son mucho más amplias. Incrementar la eficiencia, aumentar la productividad, ahorrar en recursos o hasta minimizar las emisiones de CO2. Además, esta tecnología no entiende de tamaños, y podrás aplicar el AIoT tanto si dirijes pyme como si se trata de una multinacional.
Vigilancia inteligente
La vigilancia de seguridad inteligente realiza análisis con datos en tiempo real para ayudar a detectar si está sucediendo algo sospechoso en una ubicación determinada. Esto es muy útil para pequeños negocios, los cuales son frecuentados usualmente por el mismo público. Ayuda a mantener seguros a los compradores mediante el reconocimiento de imágenes que detecta e identifica a infractores reincidentes que causan molestias en el establecimiento.
Vehículos autónomos
Otro buen ejemplo del uso del AIoT en la actualidad es en los vehículos autónomos. Se utilizan radares, GPS y cámaras para tomar decisiones en tiempo real en función de las condiciones de conducción en tiempo real. Los datos se recopilan a través de sistemas IoT interconectados y se genera un aprendizaje de esta recopilación antes de llevar a cabo una acción basada en datos.
Por ejemplo, imagina que estás conduciendo en circunstancias de lluvia. La combinación de IoT y AI será capaz de detectarlo y activará los limpiaparabrisas. Además, establecerá para el vehículo una condición de conducción suave, garantizando así tu seguridad.»
Edificios de oficinas
Las empresas también aprovechan esta tecnología. Utilizan sensores conectados al IoT que les ayudan a gestionar la energía y la iluminación. Estos sensores que captan el movimiento de las personas, también son fundamentales para garantizar la seguridad. Además utilizan el reconocimiento facial para controlar el acceso de las personas a los edificios. Esto es posible gracias a una comparación de datos e imágenes en tiempo real.
También se está utilizando para determinar los patrones de acceso de cada empleado y de esta manera predecir mejores diseños de oficina para facilitar la entrada y salida.
Cada día esta combinación de tecnologías se está abriendo mayor camino en industrias y ciudades a medida que buscamos soluciones para crear una mejor «nueva normalidad» frente la actual crisis pandémica. La Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas van avanzando de manera calmada pero segura para proporcionarnos un mejor futuro a todos los ciudadanos.
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Buen día excelente articulo de un tema de actualidad, lo enfoca de manera sencilla.
felicitaciones