Por pura lógica podemos deducir fácilmente qué son los procesos industriales. Si nos ponemos algo más estrictos, podemos definirlos como procedimientos que involucran procesos químicos, físicos, eléctricos o mecánicos para contribuir en la fabricación de uno o varios productos. Además, la propia definición también nos dice que estos procedimientos suelen llevarse a cabo a grandes escalas.
Como podemos ver, transformar un bien en una materia prima puede conllevar un gran trabajo debido a los diversos procesos que se ven implicados, así como a la gran magnitud con la que se opera. Sin embargo, no hay por qué preocuparse. Esta situación puede abordarse de manera eficiente gracias a la transformación digital que cada día está más presente en la industria. Las nuevas tecnologías como el Internet de las Cosas o la Inteligencia Artificial nos pueden facilitar el trabajo más de lo que llegábamos a imaginar.
¿Por qué son importantes los procesos industriales?
Hablando desde una perspectiva socioeconómica, los procesos industriales son cruciales para la economía de la población. Sin ellos, el 90% de bienes que consideramos imprescindibles a día de hoy, simplemente, no existirían. Es cierto que se puede recurrir al método de producción artesanal, pero en ese caso, existirían una gran cantidad de productos que debido a sus costes de producción no podríamos permitirnos. Además, estos procesos surgieron a raíz de la Revolución Industrial, trayendo de su mano la ‘clase media’ que conocemos a día de hoy, en la que la mayoría nos identificamos.
En definitiva, los procesos industriales nos permiten fabricar un número mucho mayor de bienes, de una forma más barata, simplificando los procesos de producción y creando sociedades más prósperas.
Fases de un proceso industrial
Todo proceso industrial sigue una serie de fases ordenadas:
- Contacto y manipulación de la materia prima
- Trabajos de acondicionamiento para transformar la materia prima
- Procesamiento de la materia prima
- Separación de la materia prima para convertirla en producto
- Creación del producto final
Queremos destacar que, como sabemos, los recursos naturales (materias primas) no son ilimitadas. Por tanto, es importante, sea cual sea nuestro sector, llevar a cabo un desarrollo sostenible a la hora de producir. Hay que tener en cuenta los límites y mirar cada vez más los costes sociales de nuestra producción, si no queremos acabar acarreando consecuencias negativas para nuestro propio negocio.
Tipos de procesos
Dependiendo del sector de nuestra empresa, es importante estudiar y reconocer qué tipo de proceso industrial nos viene mejor y se adapta más a nuestras necesidades, ya que no todos son óptimos para todas las industrias.
En la actualidad distinguimos 4 tipos de procesos industriales, los cuales vamos a ver brevemente a continuación.
Continuos
Son procesos que producen bienes sin interrupción durante determinados períodos de tiempo, siempre de manera continua. Son cadenas dedicadas a producir el mismo artículo, y normalmente lo hacen durante las 24 horas del día, 7 días a la semana, durante todo el año. Mediante este proceso suelen fabricarse bienes estándar de consumo diario.
Discretos
Este tipo de operaciones se centrar en crear un sólo producto a la vez, a diferencia de lo que ocurre en los procesos continuos. Suele utilizarse para productos de grandes dimensiones que necesitan abarcar varios procesos de transformación en un mismo lugar.
Por lotes
Este es el proceso más añejo de todos. En este caso los productos se crean en grupos o cantidades definidas y específicas, en una época concreta. Una característica relevante de este proceso es que se realiza toda la producción paso a paso, es decir, no pasa de fase hasta que todos los productos hayan finalizado la fase anterior. Suele utilizarse en sectores donde los estándares de calidad son muy altos, o los productos muy estacionales.
En masa
Es muy similar a la producción de flujo continuo, sin embargo, en este caso el proceso industrial se organiza en torno a ciclos de producción y ciclos de descanso. Se realiza en menor tiempo, conlleva menos costes, más abaratamiento de los productos y una mayor competitividad de mercado.
¿Cómo maximizar el rendimiento de mis procesos industriales?
Si quieres que tu negocio esté bien posicionado y a su vez te permita obtener unos beneficios mayores, presta atención a los siguientes tips para mejorar el rendimiento de tus procesos industriales.
1. Optimiza los procesos
Si queremos optimizar procesos que no van demasiado bien, o simplemente, podrían ir mejor, debemos prestar mucha atención a los problemas que se encuentran con regularidad. Algunas de las preguntas que podemos hacernos son: ¿Cuánto tiempo tarda el proceso? ¿Cuánto desperdicio produce? ¿El proceso se ralentiza o se detiene en algún punto en particular? También podemos cuestionarnos si existe la posibilidad de obtener los suministros de proveedores diferentes, o si hay alguna manera de acortar la cadena de suministro para hacerla más eficaz.
Se pueden llevar a cabo varias acciones para optimizar la producción de tu empresa o ensamblar más productos gastando menos dinero. Para ello importante observar de cerca cómo se producen los artículos y cómo funciona el programa de producción de la planta. De esta manera podremos ahorrar tiempo y dinero invirtiendo un proceso que antes requería mucho esfuerzo.
2. Reduce en desperdicios
Reducir la cantidad de deshechos que genera nuestra industria nos ayudará a ahorrar dinero y, optimizar la producción. Podemos encontrar deshechos en diferentes formas:
- Residuos de envases: si tu industria produce productos envasados, puedes reconsiderar el material utilizado y la cantidad que inviertes. Es posible que descubras maneras de conservar la seguridad de tus productos utilizando materiales más baratos o que quizás generen menos deshechos. También es importante elegir materiales reciclables para el usuario final.
- Superproducción: es importante conocer la demanda real de tus productos para no acabar invirtiendo tiempo y dinero en productos que finalmente acabarán como residuos.
- Productos defectuosos: aquí aparece otro punto importante, el mantenimiento industrial. Gracias a él podremos poner fin a altibajos como este de manera eficiente.
- Equipos de baja calidad: es importante contar con la maquinaria adecuada, de calidad. Si la máquina no trabaja correctamente, nos arriesgamos a perder la calidad de nuestros productos. También es probable que se produzcan averías con más frecuencia, teniendo así que parar la producción e invertir en reparación. Es completamente aconsejable invertir en una maquinaria de calidad a largo plazo.
3. Evita la parálisis operativa
Como acabamos de mencionar, la maquinaria es una parte fundamental de todo el proceso productivo. Algo que no debemos permitir es que estas permanezcan inactivas y mucho menos, que esto ocurra con todo el aparato productivo. La alta disponibilidad de horas de trabajo, es uno de los factores más importantes en la maximización del rendimiento de procesos industriales. Para lograrlo, es imprescindible que todas las máquinas cuenten con un mantenimiento adecuado para que resistan toda la jornada, y más.
Otro indispensable es contar con un generador eléctrico para que no se vea afectada la productividad en caso de una falla en el sistema de suministro nacional.
4. Automatiza la cadena de suministro
La automatización es algo fundamental para las empresas de hoy día. Viene impulsada por la transformación digital que ha ido ganando peso en los últimos años. Gracias a las tecnologías que con ella vienen, como el IoT o el Big Data, la cantidad de procesos industriales ha aumentado exponencialmente hasta abarcar tareas de gestión de clientes, copias de seguridad y recuperación, scheduling, todo en un mismo día laboral y quizás, con menos números de trabajadores que años atrás.
Automatizar procesos puede ser increíblemente sencillo y ofrece una ventaja competitiva impresionante, para esto, debes invertir en las herramientas adecuadas de hardware y software. Esta es una inversión casi necesaria, y con un retorno a corto plazo.
5. Realiza un seguimiento constante
Para que los 4 tips anteriores surjan efecto, es imprescindible llevar a cabo este último, darles el seguimiento oportuno y continuo. Esto nos proporciona un feedback de la situación, que nos permite recoger los incidentes que hayan podido surgir a tiempo real, así como los aportes que den pie a una mejora.
Este seguimiento, además de conllevar análisis de indicadores, conlleva estudio de operaciones, detección y análisis de fallas, auditorías, observación y recolección de datos en tiempo real, entre otras cosas.
Además, existen plataformas IoT como FIWOO que te ayudan a conectar de manera holística los diferentes apartados de tu industria, obteniendo información continua de todos ellos en un mismo dispositivo, en tiempo real y de forma sencilla.
Si tienes alguna duda sobre procesos industriales o quieres integrar estas soluciones en tu empresa, no dudes en contactarnos.
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